Tuesday, January 23, 2007

Micro-historias del Dolor en el Conflicto Colombiano

Hace algunos años, por invitación de Rafael Molano, entonces director de la revista Gatopardo, decidí hacer una hacer una crónica sobre las micro-historias del dolor en el conflicto colombiano. Al comienzo el tema parecía demasiado basto. En el titulo de micro-historias del dolor cabía cualquier cosa. Cualquiera de los lados y los dolores podía opacar dolores más profundos, desesperanzas mas dolidas por la sinrazón de las armas. Entonces decidí que la crónica tenía que ser una canción a la esperanza. Una pequeña serenata de reconocimiento a una de esas personas que a pesar de haber sido victimas directas del conflicto aun se levantan todos los días a construir a Colombia con sus manos, a pesar de su dolor, lejos del rencor y el miedo.
Entre íres y venires me encontré en el Festival de Poesía de Medellín, y en uno de los recitales de poesía que suele dar la Fundación Prometeo en los barrios deprimidos de la ciudad, encontré la micro-historia sobre la que iba a hacer la crónica; es decir, conocí por casualidad a una mujer robusta, de labios gruesos, cabello rebeldemente crespo y piel coloreada por esos días de jornal que habían sido su forma de ganarse la vida hasta antes de que el conflicto le abofeteara la vida; su nombre Eloisa.
Desplazada de algún lugar de Córdoba de cuyo nombre no me da la gana de acordarme, llegó como han llegado casi todos los colombianos sin destino ni futuro a las laderas de las principales ciudades; es decir, como desplazada. Su trabajo como jornalera no servia de nada en las comunas en las que hizo refugio, entonces una vecina le sugirió vender arepas de maíz en Junín.
Hoy Eloisa aun vende arepas. Casi se ha acostumbrado a las interminables noches de pesadillas en las que hombres armados acaban una y otra vez con su familia; su esposo y sus hijos. Pero esta vez ha decidido que quiere ver de frente al hombre que ordeno la muerte de su familia. No se trata de recriminar, dice, mientras la voz se le pone tibia y los ojos dolorosamente cristalinos, “…solo quiero saber porque…” exclama.
Pero al llegar a la Alpujarra se le informa que tiene que llenar un formulario en el que debe relatar los detalles que la certifican como victima. Es decir, debe volver sobre su dolor, recordarlo paso por paso, lacerarse a si misma mientras trae de vuelta los más tenebrosos momentos de su memoria para ponerlos sobre un papel para satisfacer las demandas de esa justicia que no supo estar cuando el hombre que ella intenta ver ahora, Salvatore Mancuso, acabo con su familia, su pasado y su futuro. Su dolor no importa, su micro-historia, por humilde y distante de cualquier rédito político, solo sirve para volverse rabia y amasar la harina que se volverán arepas con las cuales aun se gana la vida.
Y mientras el asesino describe tranquilo y sin el más mínimo remordimiento sus “acciones de guerra”, como quien describe una circunstancia apenas desagradable; a las victimas les toca justificar su dolor volviendo sobre su historia, es decir, justificar su interés en el presente político del país cuando han sido obligados ha hacer parte de ese pasado que lo constituye, pero no desde el lado que toma decisiones y aprieta gatillos, sino del que pone el dolor, la sangre, las lagrimas y los muertos.
En honor a ese valiente silencio de Eloisa que todos los días sin saberlo, sin ser consciente de ello, construye país, dejando la rabia en la masa de sus arepas y no en un fusil que multiplique la rabia, la crónica que escribí entonces aun espera a que el viento de los violentos de cualquiera de los bandos deje de soplar y mas Eloísas y menos Mancusos sean los héroes del país.

Monday, January 15, 2007

Mediadores y Malos Oficios Entre Palestinos e Israelíes


Sin importar la dimensión del conflicto, la labor del mediador, facilitador, o persona de buenos oficios debe ser la de generar confianza en las partes, primero hacia sus funciones y luego hacia la independencia y transparencia de las propuestas con las cuales pretende encontrar a las partes en conflicto. Normales e incluso necesarios, serán los llamados de atención de las partes por sentir un compromiso o cercanía del mediador con uno de ellos en detrimento del otro, puesto ello demostrará su interés en no salir lesionados de la mediación que se lleva a cabo.
Sin embargo, de lo que no debe y no puede ser señalado un mediador, es de no entender la dinámica del conflicto en el cual pretende mediar. O de confundir la labor de mediador con la de negociador. Especialmente cuando estos señalamientos son ciertos; como viene ocurriendo con Condolezza Rice desde hace cierto tiempo en el conflicto árabe-israelí.
De hecho el pasado fin de semana, la “mediadora” estadounidense se reunió con Mahmoud Abbas en la ciudad de Ramallah con el fin de revivir el proceso de paz entre palestinos e israelíes. Pero contrario a las expectativas con la que partió hacia la región, y a la confidencia con la que aun se refiere a las posibilidades de repotenciar la hoja de ruta, la dinámica y los intereses de las partes se mueven en dirección opuesta. El poder político de Hamas esta vigente, y aun si Abbas quisiera tomar decisiones sin consultarlos, el mandato del pueblo palestino a favor de Hamas ha sido claro.
Según se lo hizo saber el presidente de la autoridad palestina a Rice, los acuerdos a los que había llegado con el primer ministro israelí Ehud Olmert, en cuanto a la entrega de cien millones de dólares que el Estado israelí debe a la autoridad palestina por concepto de impuestos palestinos, pero que no entrega desde que Hamas accedió al poder en la región, no han sido entregados, lo cual ha desestabilizado aun mas su situación con Hamas. Además de los cada vez mas constantes enfrentamientos entre Palestinos leales a Hamas, y aquellos leales a la Autoridad Palestina, que tienen al borde de una guerra civil a Palestina. Como si no tuvieran suficiente con los bloqueos, incursiones y ataques del ejército israelí, palestinos de un lado y otro han decidido convertirse en enemigos de sus pares. Hasta el punto que Abbas ha pedido ayuda económica a Estados Unidos para fortalecer militarmente fuerzas leales a él, insertando más confusión, sangre y distanciamiento en un pueblo que debería estar construyendo alternativas que pusieran fin al conflicto.
La situación en la región es cada vez más inestable. Y gestiones como la de Rice y el gobierno estadounidense, que pretenden fortalecer militarmente un lado en detrimento de las democráticas decisiones del pueblo palestino solo le harán mas daño a las posibilidades -de por si remotas- de reconciliación.

Saturday, January 06, 2007

Les Enfants De Don Quichotte; a poetical example to handle social issues

Walking on the winter before elections through the bourgeois bohemian “Canal St Martin” in Paris, you will be able to see around two hundred red tents that have been placed on both sides of the channel since last December. On every small red tent lives a homeless that has endured the harsh conditions of the French winter, with an inscription on top of the tent that says: “Sans Domicile Fix”, which stands for “without fixed address”.
The tents are part of a demonstration placed together for an organization called “Les Enfants de Don Quichotte,” with the purpose of calling the attention to the issue of homeless of not only the French people, the media, and the actual French president Chirac, but also to those who are campaigning to replace him on the power.
Since then, hundreds of people have spent the night with the homeless, sharing their callous conditions as a sign of solidarity to their cause, to the point that the issue was included on the New Year’s speech of the President Chirac, in which he promised to increase the funding to improve the condition of the homeless. But even if the actual French president fails to fulfill his word, almost all the candidates campaigning to replace Chirac have signed the group’s petition.
Although the issue of homeless in France is relatively mild as the New York Times has called it –“…the numbers of the entire country are quite similar of those that hold only a city like Los Angeles…”- the invective and romanticism of the organization, as well as the non-violence of their actions have placed them in the center of the French discussion to the point that a reliable solution appears to be coming.
But with the positive answers that “Les Enfants De Don Quichotte” has received in such a small period of time, one feels compelled to ask; what is wrong with the issue in Vancouver? Why whereas the French movement satisfy their demands without any violent means, the Vancouver movement that has more or less the same demands, does not receive the massive support that the issue has received in France.
The answer to this question might have at least three components.
The first part of the answer could be the time that “Les Enfants de Don Quichotte” choose to place the tents on the border of the channel. Because they did it at the beginning of December, a time when, whether you like or not, people’s sensibility is really touched by this kind of circumstances for the proximity of Christmas.
The second part might be the place where they have installed the tents, because they have not done so, where the French homeless usually spend their nights, but on an exclusive sector where like it or not you have to see them.
Finally is the non-violence of their actions. Starting with the poetic suggestiveness of their name, “Les Enfants de Don Quichotte”, state from the beginning that there is an utopical air on their proposal, although that, they continue with it.
There is a lot to learn still for the Committee in Vancouver, and for all those organizations around the world that trying to bring attention to social issues only receive repression and police, instead of political attention.

Wednesday, January 03, 2007

La estupidez política de ETA




Ninguno de los diversos intentos de negociación llevados a cabo a través de los años entre el gobierno español y el grupo separatista ETA, han estado animados por el altruismo. Desde el primero hasta el último de esos intentos, ha llevado implícito el reconocimiento del gobierno español de la imposibilidad de acabar con ETA, al menos por los mecanismos establecidos por la ley; al tiempo que ha llevado implícito el reconocimiento de la imposibilidad de lograr la separación de la región basca, por parte del grupo separatista, bien sea por medios violentos o no.
Ello pone de presente que lo que sitúa a ETA como un interlocutor político del gobierno español, es simple y sencillamente su capacidad de afectar el día a día de los españoles, con atentados como los que los han hecho populares.
Sin embargo, el hecho de que sea la violencia la que hace a ETA interlocutora del gobierno español para discutir no solo la posibilidad de la salida negociada, sino también la posible independencia de la región basca, no quiere decir que cualquier desavenencia, dificultad o falta de espacio para negociar va a ser resuelto con atentados como el del Aeropuerto Internacional Barajas.
En casos específicos como el de ETA, la violencia solo consigue sentar a la mesa al opositor político a debatir las diferentes posibilidades que pueda tener la alternativa negociada. Pero en procesos de paz con reglas tan claras, como el que fue roto por el gobierno español luego del señalado atentado; esta clase de acciones militares solo pueden entenderse como una estupidez política de la cúpula de ETA, la misma que recortó los poderes negociadores a Josu Ternera en Agosto del año pasado, fecha desde la cual se inflexibilizó la posición del grupo separatista en la mesa, pues según la cúpula el designado negociador no había logrado capitalizar el cese al fuego como era de esperarse.
Si los acuerdos a los que se estaban llegando no venían siendo cumplidos por el gobierno, o lo que se estaba consiguiendo en esta era menos de lo que se esperaba, ello debió ser puesto primero en conocimiento de los negociadores para que fuese transmitido al gobierno, y luego a los medios en caso de no obtener una respuesta satisfactoria del Palacio de la Moncloa.
Pero esta clase de acciones sin un rompimiento previo y publico del proceso solo fortalece políticamente al partido Popular, y a todos los opositores de la salida negociada, al tiempo que hace aún más difícil de lo que ya venia siendo la continuidad o reinicio de unas conversaciones de paz que puedan llegar a un final pacífico.
No sólo se le olvidó a la cúpula de ETA el comunicado del 22 de marzo en el que anunciaba el cese al fuego, sino también los previos frustrados intentos de paz que no llegaron a ningún lugar por falta de voluntad política de los diversos gobiernos españoles de acometer la responsabilidad social y el costo político de llevar la negociación hasta donde fuese necesario para alcanzar la paz y la tranquilidad de los españoles, pues prefirieron creer en la falacia militarista que el miedo fortalecería su posición en la mesa, a continuar por el árido camino de la paz.
Con cada una de las esquirlas de la bomba del aeropuerto Barajas no solo ha volado el proceso de paz entre el gobierno español y el grupo separatista, junto con la esperanza de un final concertado a la lucha separatista, estas esquirlas también han hecho evidente que ETA aun no parece estar madura para acometer un proceso de paz. O por lo menos no demuestra estarlo.


hollman.lozano@yahoo.ca