Monday, July 03, 2006

Nicoletta Tomas o el Despertar del Arte Contemporáneo.

Por: Hollman Lozano


Muchas veces le he dedicado esta columna a temas políticos. Conflictos armados en los que el mundo se hace y deshace. Dolores en los que la humanidad se pierde y se inventa. Pero esta vez el tema ha cambiado un poco. Hace unos días buscando imágenes para un tatuaje para alguien muy especial encontré imágenes de la obra de una pintora española llamada Nicoletta Tomas. Solo ví una de sus series, llamada las ventanas del alma, pero quede tan encantado que busqué más acerca de su obra y encontré la página principal de la autora. En ese momento pensé que en una época como ésta, en la que como lo señalara Arthur Danto, “…en arte todo es posible…”, resulta reconfortante encontrar obras como la de Nicoletta. Pues es mostrarle al mismo Danto que contrario a sus sobre-estudiadas teorías el arte no desapareció con Andy Warhol, que ese persistente caos al que se refiere cuando habla del estado actual el arte, no es tal, sino que por el contrario persiste vigoroso y comunicativo en las creaciones de pintoras como Nicoletta.

Pero la obra de Nicoletta no es valida solo para desacralizar el celebre teórico estadounidense.

Esta sirve también para afirmar esperanzados que no todo esta dicho. Que luego de la deconstrucción de la figura, y las permanentes transgresiones del cuerpo humano bajo el nombre de arte, sutilmente denunciadas por el celebre académico francés Paul Virilio, aún tenemos espacio para creer y admirar por nosotros mismos ese arte que no es una idea perdida en la inconsecuencia de unos brochazos animados por la ira o la tristeza del artista sin mediar ningún proceso creativo. Por el contrario, este es un proceso estético creativo comunicador, que puede incluso en casos como el de la obra de Nicoletta, devolvernos hacia nosotros mismos mientras la miramos, pues es como magistralmente se llama una de las series de obra, como si cada uno de sus cuadros fueran las ventanas del alma, al alma de cada uno de los que la mira y se pregunta a si mismo que puede estar pasando para que alguien pueda tener reflejado tanto dolor en la cara, es buscar el dolor propio en cada una de esas caras, y buscarse también al mismo tiempo, como el posible causador de alguna tristeza similar o tal vez mas profunda que la que expresan los cuadros de Nicoletta.
Es necesario poner de presente que para admirar la obra de Nicoletta, no se requieren esas fantabulosas teorías con las que los críticos de arte se ganan la vida. Para admirarla solo es necesario observar uno de sus cuadros, ni siquiera se necesita disposición alguna, pues luego de observarlos, es como encontrarse con la estremecedora soledad del sigo mismo. Una especie de desolación que persiste en esas caras, como si estuvieran atrapadas en un instante permanentemente presente de dolor, una suerte de lenta angustia perpetúa que se eterniza dentro del marco de la pintura. Una levedad tan insoportable que estremece cada una de la fibras de todo lo humano que tenemos. Levedad que incluso llevó a que uno de sus cuadros fuera escogido como la carátula de uno de los libros de Milan Kundera, pues sus cuadros son una artísticamente magistral dolorosa angustia que persiste, pues las mujeres de sus ventanas al alma, no son mujeres en transito a ser descubiertas, ellas no estaban esperando a los ojos del espectador para ser arte, ya que ellas lo son incluso si nadie las mira. Lo son en el dolorido silencio que transmiten sus caras.
Personalmente recomiendo su obra. Es una de las mejores que he visto en muchos años. Para quienes estén interesados e visitar su página la dirección es www.nicoletta.info .





2 comments:

Anonymous said...

Hola, Hollman. Muchas gracias por tu email, por escribir sobre mi obra, es para mi un honor...

Una obra está viva porque el espectador asi la siente, porque la vuelve a crear dentro de su mundo interior, unico y distinto.......asi que gracias por estar ahi, gracias por tu mirada, para mi es un regalo.
Nicoletta

Anonymous said...

Señor Lozano dejeme decirle que tiene toda la razon. La obra de Nicoletta es muy buena, es translucida, comunicativa abierta. Muchas gracias por acercarnos a ella, por dejarnos verla con sus ojos, y con esa maravillosa forma de escribir que usted tiene.
Siga asi, el mundo, todos nosotros necesitamos pensadores como usted que nos iluminen y nos muestren el camino, asi como las dificultades de lo que pasa en el mundo.
Gracias.

Catalina. La mas fiel de sus admiradoras